El guión estaba escrito. ¿El cebo para atraerlo? Yo mismo, creo que sabe bastante bien que he sido yo el de la notita.
Estaba seguro que después de que el otro día volviera a mi piso. Algún vecino le dio el chivatazo. Apostaría a que son de los policías que están noche y día con su coche en mi puerta esperando a que aparezca.
A eso de las 8 de la tarde voy a mi piso con toda la tranquilidad del mundo. Como bien dicen,la maldad no tiene porqué estar relacionada con la locura. En la acera de enfrente, allí está. Entro al portal,subo las escaleras y mientras abro la puerta de mi piso, oigo como el portal se vuelve a abrir.
A jugar. Entraría por la puerta si, pero no saldría. Y yo, llevaba la bomba.
Con la misma tranquilidad con la que entro. Salgo por la ventana del baño con la ayuda de una cuerda atada al lavabo.
Cuando llego al suelo lo oigo asomado a la ventana.
- Alto ahi! (Claaaaaro, y yo voy y me paro no te jode, como mola huir de la poli)
El madero no se atreve a tirarse por la cuerda y da la vuelta. ¿Inconveniente? No sé. Menos tiempo para mí. Voy corriendo hacía su coche. El hijo de puta lo ha cerrado. La idea era meterle la mochila debajo de su asiento. Toca ir de sobrado de nuevo, me encanta. Le espero sentado en su capó. Cuando me ve no sabe si sorprenderse o extrañarse. Me apunta con la pistola. Sin oponer resistencia me esposa y me sienta en el asiento delantero. Conduce con la mano derecha y con la izquierda me apunta con la pistola. No veas como cambia de marchas el hijo puta, mejor que yo con las dos manos libres.
Apenas dijo palabra. Era el poli bueno. Si después de tanta corrupción había seguido libre era porque sabía medir sus palabras. No era de los malos de película que te cuenta su plan para que te de tiempo a escapar. Pasamos por delante de la comisaría y pasamos de largo. Pues parece que no vamos allí.
Ahora todo sucede muy rápido. Parecido a los episodios en los que todo tornaba a negro. Pero estaba consciente. Le empujo, dispara al techo, abro la puerta y me tiro aprovechando la reducción de velocidad para girar. Me doy una ostia con la esquina, él intentando que no me escape se estrella con dicha esquina.
Me levanto, me acerco al coche, se ha dejado media cara en el salpicadero y la otra media en el volante. Mi diagnóstico: como una rosa. El suyo: muerto. Vaya una mierda de bomba, ni siquiera ha explotado con un golpe como este. ¿Y ahora que hago con ella?
No se ni que hacer ni donde ir. Divagaré toda la noche, al fin y al cabo ya queda menos de un dia. Intento desactivar la bomba. No tengo ni puta idea. Solo queda decidir donde hacerla explotar, eso o reventar lo próximo con R que encuentre.
No está tan mal pasear por la noche.
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