(Día 23)
Pues lo dicho, hoy es “Fiesta”. Sinceramente preveía un coñazo de día. Y lo está siendo. Suena el telefono.
- A? + Quien si no? - He quedado con F y G para tomar algo. ¿te apuntas? (No es que me lleve mal con la gente, simplemente que no los trato) + Perfecto ya creia que me iba a tirar todo el día enclaustrado aqui ¿Donde y cuando? - mmm... Nos vemos en... Pioneros a las 12. + Ok, esperemos que no llueva mucho. Nos vemos dew - bye
Me ducho me visto y a la calle. Llego 5 minutos antes que el resto. Culpa de esto es que calculo el tiempo para llegar y luego siempre voy más rapido de la cuenta andando. Odio esperar.
Aparece A con los otros dos. Menos mal. Si hubiera tenido que esperar con alguno de los otros hubiera sido silencio incomodo.
- ¿Al abuelo? + Al abuelo (conocido bar de la localidád)
Tras la tercera cerveza ya me van cayendo mejor F y G. Tras la sexta “El peso del mundo te parece menor” Tras la décima somos amigos de toda la vida.
De esta parte tengo vagos recuerdos. Recuerdo que me di una ostia con el marco de la puerta en la rodilla. Mañana dolerá. Me tumbo en la cama y todo me da vueltas. Como se dice por aqui, tengo que echar el ancla. Saco una pierna de la cama y la apoyo en el suelo.
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